Cinco años han pasado desde que la pandemia obligó a gran parte de la humanidad a resguardarse en sus hogares. Y mientras que algunos descargaron TikTok, aprendieron a hacer pan de masa madre (¿alguno sigue haciéndolo o comiéndolo?) u organizaron fiestas clandestinas, la artista Sofía Rocha usó ese paréntesis para cumplir uno de sus grandes sueños: lanzar una marca de joyas, la misma que hoy en día adorna a Kourtney Kardashian, Olivia Rodrigo y Maria de The Marias.
Sofía Rocha (Santiago, Chile, 1993) creció rodeada de un ambiente que enaltecía la belleza, aprendiendo desde muy pequeña a ‘escribir con colores y a moverse con música’. Esa crianza la llevó a estudiar Licenciatura en Artes y, posteriormente, a cursar un máster en Diseño Gráfico en España, donde surgiría su interés por la joyería. “Siempre me gustó el ornamento, decorarme a mi misma, a mis juguetes, mis dibujos, mi pieza o de cualquier forma posible. Me resulta natural experimentar la vida a través de las cosas, guardando recuerdos en ellas, me interesa la belleza de los tiempos pasados que vuelven a vivir en cada momento instalado en los objetos”.
“Siempre me gustó el ornamento, decorarme a mi misma, a mis juguetes, mis dibujos, mi pieza o de cualquier forma posible. Me resulta natural experimentar la vida a través de las cosas, guardando recuerdos en ellas”
Sin embargo, no sería hasta la pandemia que esa pulsión creativa se haría realidad, cuando la diseñadora viajó a Chile y quedó atrapada en el país debido a las diferentes restricciones de movilización. Un contexto ‘ideal’ que le permitió darse el tiempo para desarrollar las primeras piezas que definirían luego el estilo de su marca homónima. “El proceso de aprendizaje fue muy intuitivo, de mucho ensayo y error, me apoyé en vídeos de YouTube, en libros y hablando con la misma comunidad de joyeros para resolver mis dudas”.
Este proceso de formación la llevaría rápidamente a enamorarse de la creación ancestral, que valora tanto los materiales primitivos y austeros como los preciosos y complejos. Apoyándose así en la técnica de la cera perdida, con la cual modela, derrite y busca ‘la forma y el símbolo’ que sostenga su imaginario. “Comienzo la idea desde un trabajo anterior, observo la figura, pruebo su movimiento y cómo se presenta en un contexto ideal, es decir, siendo utilizada por alguien. La forma se transforma en mi cabeza hacia lo que me gustaría ver. Esto puede llevar días, semanas o meses después en que la figura reposa y aparece como un acto de magia”.
JOIA: Suena como que todo es muy intuitivo y libre, ¿tienes una rutina de trabajo específica?
Sofía: No, soy una persona un poco impulsiva cuando se trata de trabajar. Aún cuando en mí predomina el orden y la estructura, cada día puede ser diferente y eso hace que ame profundamente lo que hago.
JOIA: ¿Cómo es un día normal de Sofía?
Sofía: Me gusta comenzar temprano y ser productiva durante la mañana. Veo mis pendientes y hago los pedidos que tenga que hacer. Si tengo que ir a buscar algo donde mis proveedores, ir al correo o ir en la búsqueda de piedras para mis clientes ese es el momento. Ya en la tarde me gusta encerrarme para ser más creativa. Revisar apuntes o bocetos de ideas, jugar con la cera o ensamblar piezas de metal que ya tengo para hacer pruebas, presentarles ideas a mis clientes o desarrollar mis proyectos personales.
Impulsiva o no, esta metodología ha llevado a la santiaguina a triunfar a nivel mundial, colaborando con celebridades tanto en alfombras rojas como también en tours, demostrando con ello la versatilidad de su particular estilo orgánico y de ensueño. “Todo eso ha ocurrido gracias a las redes sociales, Instagram me permitió llegar a personas que nunca pensé que lo haría. Nunca sabré realmente cómo llegué a esos estilistas que me contactaron, pero me imagino que el algoritmo me favoreció. Ha tenido un efecto muy positivo y creó una mayor confianza con mis clientes”.
“la figura reposa y aparece como un acto de magia”
Además de esto último, las redes sociales han permitido que la joyera mantenga una conexión activa con su país natal, el cual abandonó hace algunos años para volver a vivir a España, donde se encuentra su taller hoy en día. “La diferencia entre el mercado chileno y el europeo es que en este último tienes muchas más cosas al alcance. Todo el intercambio físico, como los envíos, es más fácil y rápido. El internet ha hecho un cambio en el modelo de negocio y de las fronteras, donde las distancias ya no son un impedimento. De todas formas, creo que exportar un tesoro desde Chile es mil veces más significativo para mi que desde cualquier otro lugar”.
Y es que la frase que recibe a los compradores en el sitio web de Rocha: ‘Aquí encontrarás una colección de joyas creadas desde lo más profundo de mi corazón y mi alma’, va de la mano con la inspiración central de su obra: la nostalgia propia del migrante. “Lo que transmito en mi trabajo viene un poco de experimentar la pena de estar lejos de mi país, de irse del lugar de donde provienen todos mis recuerdos, pero también es la felicidad de tenerlos guardados conmigo y llevarlos puestos en mis joyas”.
JOIA: ¿De qué manera afectó tu diseño el emigrar?
Sofía: Ser migrante ha significado explorar la vida desde la incomodidad y en un estado de alerta constante. Creo que eso me ha incentivado a comprometerme más seriamente con lo que hago. Mi estilo es mucho como soy yo, mi personalidad, las cosas que elijo ver, lo que quiero tener y busco. Hacen mucha referencia a un mundo onírico y etéreo, frágil y misterioso.
JOIA: ¿Qué consejos les darías a las personas que están interesadas en iniciarse en el diseño de joyas?
Sofía: Ser constante, trabajar mucho, y pedir consejos y ayuda a las personas que saben más que tú. Tener seguridad de lo que quieres y siempre, pero siempre, seguir tu intuición y propósito.
En la actualidad Sofía continúa trabajando en sus distintas líneas de joyas, que incluyen aros, anillos, collares y pulseras, además se encuentra próxima a lanzar anillos de compromiso y joyería con metales y piedras preciosas. “Tengo muchísimos planes e ideas que seguirán desarrollando mi universo más allá del metal, utilizar otros medios que me permita explorar otras capas. Me gusta mucho descubrir las diferentes capas de una persona, una historia o una experiencia, y encontrar en ellas las cosas que las hacen bellas y llamativas que no son tan obvias”.
Conoce más de su trabajo en @sofiarochajewels



