La semilla de estas imágenes de Liberta Romano se encuentra en dos canciones. Por un lado, la letra de “Simplemente amigos”: de pequeño no llegó a cuestionarse el por qué del “pero es que en realidad no aceptan nuestro amor”, ni se preguntó quién debía aceptarlo, ni mucho menos conoció la historia que había detrás, la de Ana Gabriel y Verónica Castro. La cantó mucho tiempo sin comprenderla realmente.
“La Irma la ponía a todo volumen cuando cocinaba y yo, a mis 8 o 9 años, todavía sentía que la música era una realidad siempre presente e incuestionable, así que la absorbía como aire. […] Hace algunos meses, muy enamorado, sentado de copiloto en una carretera rumbo a Cocoyoc, la Mish me mostró una canción, la puso muy fuerte y la cantó. Me sumé en el coro y sentí como redescubría en un contexto infinitamente diferente, una de las canciones más antiguas e intensas de las que tengo recuerdo. Me he visto amando tanto como Ana Gabriel lo hace en esa canción, la única diferencia es que nunca en mi vida he sentido la necesidad de esconderlo y creo que ni siquiera soy capaz de dimensionar lo que eso significa. (Esta) exploración se basa en todos esos amores profundamente escondidos, durante décadas y hasta una vida entera. Nunca he tenido que ocultar un amor y no me había percatado de que es un privilegio que muchas personas no han podido conocer”.
“(Esta) exploración se basa en todos esos amores profundamente escondidos, durante décadas y hasta una vida entera”
La otra lírica que inspira a Liberta es la de “Young and Beautiful” de Lana del Rey. “Will you still love me when I’m no longer young and beautiful?”, dice su letra. “Habla de esta idea de que cuando somos viejos ya no somos atractivos o dudamos de si merecemos o no amor. Es una duda que está en muchas personas. ¿Soy, para ti, más que simplemente juventud y vitalidad? ¿Estaré en tu vida hasta que seamos viejitos? Es importante que existan referentes de amor de todo tipo, expresiones de ternura ligadas a todas las edades. Y así es como conectan estas dos series para conformar una sola: ¡Pero es que en realidad, NO aceptan nuestro AMOR!”.
Las parejas “artificiales” de las imágenes demuestran su afecto ante un medio acuático, sin llegar al gesto explícito del beso, es la antesala de ello, la intimidad real entre dos personas. “El ingrediente clave en este proyecto es la ternura, por eso muchas veces no llegan a tocarse, es más la alegría del momento previo o el relajo del momento posterior, la calidez de un abrazo que te da paz. El agua es un simbolismo muy personal; pienso recurrentemente en la idea de re-encarnar en un lago y como funciona la temporalidad en esa dimensión, cuanto tiempo pasa antes de que muera un lago. El agua representa un período muy largo en relación a la vida de un humano y, en este caso, ese lago los acoge y acompaña probablemente una vida entera. Además, visualmente, resulta en una instancia ritual».
Estas imágenes son composiciones digitales construidas con fotografías reales de pieles, texturas, agua y cielos, además de cerca de 500 imágenes IA basadas en trabajos anteriores del artista. Pero, más allá de lo técnico: estas imágenes “son una representación de amores que sí existen, que han existido y que van a seguir existiendo”.
Sobre Liberta Romano:
“Liberta Romano es un artista interdisciplinario actualmente viviendo en Ciudad de México, que combina el cine y la creación de imágenes en proyectos narrativos que cruzan las barreras del género y el formato. Su trabajo personal es el motor evolutivo que lo impulsa a descubrir nuevas formas de generar relatos y conecta la realidad y la ficción en dimensiones creadas por símbolos ocultos en la oscuridad, la luz, la humanidad, el amor, la ironía y la magia”.
