¿Te imaginas crecer en una casa donde todas las paredes son un lienzo en blanco? Eso fue lo que le pasó a Lugosis (Italia, 1993). Su mamá era pintora así que desde muy pequeño pudo experimentar con el arte sin ningún tipo de restricción, algo que lo marcó hasta el día de hoy. Sobre todo si consideramos que lo hizo acompañado de Strato, su hermano mellizo y artista en Italia. “Mis primeros recuerdos son pintando. Crecer con un hermano que comparte tu pasión fue increíble. Nos hemos motivado e influenciado el uno al otro desde nuestra niñez”.
“Cuando éramos niños solíamos dibujar cómics juntos, creando nuestro propio mundo. Ese mundo sigue evolucionando, y nos sigue inspirando hasta el día de hoy”.
Los caminos artísticos van evolucionando junto a sus creadores, pero cuando tu punto de partida es tu propia casa es fácil pensar en cuál será tu próximo lienzo: el planeta entero. Fue en esta constante búsqueda que el artista descubrió que su verdadera inspiración estaba más cerca de lo que pensaba, en las calles de su propia ciudad. Fue así como los estrechos pasajes de Milán, y sus personajes, se convirtieron en las referencias del trabajo del artista.
La inspiración y el estilo vinieron de la mano, una vez que Lugosis comenzó a experimentar con el graffiti todo cobró sentido. Lo que alguna vez fueron lápices fueron reemplazados por aerosol y murales gigantes llenos de colores y detalles. Todo con un mismo sentimiento común, dejar un registro físico de los habitantes del underground europeo.
“Cuando era niño no me inspiraba en las calles. Eso vino cuando empecé a hacer graffitis, recorriendo la ciudad de noche, conociendo nuevas personas y viajando. Mi arte representa las subculturas europeas y la juventud en las principales ciudades. O sea, mis personajes usan TNs y manejan scooter”.
La ciudad cambia cuando las luces se apagan. Y así lo muestra el trabajo de Lugosis quien pone las armas, la marihuana y el streetwear en primer plano, pero retratado a través de una mirada particular: las caricaturas. Sus dibujos están inspirados en los inadaptados, en los rechazados de la sociedad, pero esta vez ellos son los protagonistas.
Es el lado más tierno de la violencia, con humanos y animales antropomórficos que viven en armonía y se hacen cargo del crimen organizado. Imágenes hostiles que decoran y hablan de las calles, y que fiel al estilo cartoon muestran situaciones imposibles con conejos que manejan fusiles, cocodrilos con latas de spray y abejas con bolsas llenas de efectivo. Obviamente todo está decorado con colores pasteles.
Una dicotomía que, pese a todo, guarda mucho de realidad. Es una decisión consciente que permite llevar tópicos importantes a audiencias alejadas de la vida marginal: “las caricaturas te permiten discutir temas fuertes, tristes y violentos de una manera mucho menos agresiva que una fotografía o una video”.
“Yo pinto sobre mi experiencia y las cosas que pasan a mi alrededor a través de caricaturas. A través de ellas puedo exagerar la realidad y darle una vuelta divertida. Es muy ‘en tu cara’. No puedes mal interpretarlo”.
Pero el mundo de Lugosis también habita más allá de los murales y los colores. El tatuaje, otra de sus técnicas favoritas, habla mucho sobre él y de los personajes que viven en sus dibujos. Sin embargo, en la piel su trabajo vuelve a lo sencillo. Atrás quedan los matices y las caricaturas deben vivir solo entre las líneas que les dan vida.
“Las caricaturas te permiten discutir temas fuertes, tristes y violentos de una manera mucho menos agresiva que una fotografía o una video”
“Con los tatuajes siempre tengo que buscar un balance entre el blanco y negro. Amo los tatuajes de la vieja escuela, de la cárcel y cultura de las pandillas”
“Con los tatuajes siempre tengo que buscar un balance entre el blanco y negro. Amo los tatuajes de la vieja escuela, de la cárcel y cultura de las pandillas. Y en esos ambientes es difícil conseguir color”.
Una resignificación del estilo clásico que mantiene la mente del artista en constante creación, y que le ha servido para que sus dibujos tengan identidad propia. De hecho, las calles ya le están empezando a quedar pequeñas y ha empezado a ir más allá trabajando en proyectos con grandes marcas como Nike o Carhartt con quienes ha trabajado decorando algunas de sus tiendas o con prendas exclusivas.
“Es genial, me siento muy apreciado. La mayoría del tiempo las marcas se me acercan. Yo creo que es porque las cosas que dibujo son parte de la cultura. Es como yo, es genuino. Especialmente en el streetwear”.
Berlín, Osaka o Ciudad de México. Los dibujos del artista ya traspasaron fronteras y están aquí para quedarse. Así mismo lo reconoce Lugosis, pues sabe que su futuro está en el arte, donde espera seguir puliendo su técnica y sus personajes. Así mismo lo reconoce el artista que en los próximos años espera “seguir pintando como siempre”. Sin embargo, eso no es todo, se vienen nuevos proyectos como figuras de colección de algunos sus personajes con una prestigiosa marca japonesa. Además, de estar listo para dar el salto a otros desafíos: “mis personajes evolucionan conmigo y es momento de la alta costura. Me encantaría trabajar con más marcas. Si tuviera que elegir sería LV junto a Pharrell Williams”.
Conoce más del trabajo de Lugosis en su Instagram aquí.



